Entradas

Mostrando las entradas de abril, 2021

El guayabo.

Imagen
  "Te llevo en cada gota de mi sangre   y en el paso de mi andar.   No necesito arrinconarte,   ni antes de dormir besarte" _______________________________ Jamás hubo, hablando en términos estrictamente contundentes, un acontecimiento en mi vida que me haya creer en fantasmas. Sin embargo; creo que siendo niños podemos tener una relación muy cercana con fuerzas paranormales, o de otro mundo u otra dimensión si así quieren llamarlo. Por ejemplo la magia, y aunque hoy día no pueda decir que creo en la magia, he de aceptar que alguna vez creí en ella, o más que creer en ella, yo la sentía a diario, eso fue durante las dos vacaciones de verano que pase en la casa de mi tía Katia, el lugar más mágico sobre la faz de la tierra, o al menos el único lugar donde yo pude contemplar magia. Las primeras vacaciones la tuve a la edad de diez años, la segunda vez fueron diez años después. Sólo el recordar como el agua siempre estaba agitada, ya sea que estuviera en un vaso de agua, en un ta

La bicicleta, por Valeria Luiselli

Imagen
*Texto extraído del libro de ensayos  Papeles falsos . _____________________________________ Guarde su distancia La bicicleta está a medio camino entre el automóvil y el zapato; su ligereza permite a quien va en ella rebasar las miradas peatonales y ser rebasado por las miradas a motor.  Así, el ciclista es dueño de una libertad extraordinaria: la invisibilidad. La naturaleza híbrida de su vehículo lo coloca al margen de toda vigilancia. El único enemigo declarado del ciclista es el perro, animal obscenamente programado para perseguir cualquier objeto que se mueva más rápido que él. Y claro, también son peligrosas las bestias que conducen automóviles. Aun así, el ciclista es suficientemente invisible como para lograr lo que el peatón no puede: pasear en soledad y abandonarse al curso al curso de sus meditaciones. Cada bicicleta se ajusta, además, a las necesidades de su dueño. Existen bicicletas para todos los temperamentos: las hay melancólicas, emprendedoras, ejecutivas, salvajes, no