#realpoesíacotidiana

  pero más que eso, o más allá de eso; para mí el acto de cocinar es un sinónimo, una síntesis, la tesis misma del acto de amar. Quien cocina ama, o ama más, o ama mejor, o es el acto de tratar de amar más y mejor. Muchas veces no se trata de si lo haces bien o mal, sino el intento que hace la persona por darse a los demás, de hacerlo, y si uno cree que no es bueno o lo hace mal, o si su intento de "cocinar-amar" a los demás no gusta o satisface a todos, siempre se puede practicar, como en el amor, en el prueba y error, practicando consigo mismo, cocinar para si, aprender a satisfacerse, como en el amor propio, aprender a consentirse, como aprendimos a masturbarnos; quien mejor que uno mismo para cocinar-se a través del auto conocimiento, si uno se cocina bien y rico para uno mismo con la intención de darse un apapacho al corazón, se podrá cocinar y amar bien a los demás, o como uno considera que se debe amar de acuerdo a nuestra propia virtud. Para mí es primordi

*Idea robada del post publicado en Facebook por María de Jesús Avila Mi vida ha sido marcada por la música desde que tengo uso de razón, e iba a ser muy difícil que yo no fuera un amante de esta, teniendo una mamá mega melómana y un papá músico. Siempre que surge la ocasión y comento que me considero más melómano qué cinéfilo, la gente no me lo cree. Los primeros recuerdos musicales que tengo serán de alrededor de los tres años, estando en L.A., mi papá estando en casa tocaba mucho la guitarra y cantaba generalmente canciones de Los Bukis, poco tiempo después yo también tenía una guitarra con la que según yo le hacía acompañamiento a mi papá mientras la tocaba. Cuando mamá regresa a Durango conmigo de casi 5 años y Eduardo de 2, su melomanía hacía qué en casa tuviéramos música 24/7 durante muchos años, y muchos de esos años la grabadora qué la reproducía vivía en la habitación que compartíamos yo y Nortom. La música fue muy variada la que salía de aquella consola, pero lo que más pr